LOS VIDEOS CORTOS NO FUERON UNA MODA DE VERANO
Entre 2018 y 2019, Meta estaba concentrado en la estrategia de generar videos largos para ganarle terreno a YouTube. La aparición en 2018 de IGTV y Facebook Watch iba en esa dirección. Inclusive, realizaron producciones propias y transmisiones en vivo de eventos deportivos por Facebook.
Pero en 2020 todo se fue a la primera cántica de Dante Alighieri con la explosión nuclear que resultó Tik Tok, cuya expansión continúa sin parar.
¿Resultado? En agosto de ese año, aparecieron los Reels de Instagram y un mes después los YouTube Shorts. La competencia recién se iniciaba.
Pero no fueron las únicas experiencias. Vale mencionar que tanto Twitter como LinkedIn quisieron subirse al tsunami de los videos cortos con los Fleets y LinkedIn Stories respectivamente, pero estos proyectos fracasaron, como la Coca Cola con gusto a mate.
El año pasado, la compañía canadiense de alojamientos de videos Vidyard publicó un informe en donde nos contaba que en 2020 el 60% de los videos reproducidos en todo internet no superaron los 2 minutos.
¿QUÉ PIENSAN LAS EMPRESAS SOBRE LOS VIDEOS CORTOS?
Una encuesta de Hootsuite a sus clientes indicó que el 39,4% de las empresas prefieren videos cortos para sus comunicaciones.
Entonces aquí se plantean algunos desafíos:
- Adaptación de videos
Si queremos reutilizar un video para diferentes redes sociales, es importante comprender que no se recomienda hacer «copy paste»: el formato de diseño, el sello de agua de Tik Tok, la ubicación, la extensión, etcétera; existen muchas variables que se deben considerar si se quiere recalentar el almuerzo para la cena. - Públicos|
¿Es el mismo público el de Tik Tok que el de Facebook? ¿La segmentación de un público objetivo debe ser la misma cuando se realice implementaciones de anuncios en diferentes redes sociales?
Todas estas preguntas son necesarias si queremos que la estrategia de comunicación sea más certera y optimizar la inversión en la pauta publicitaria. - Contenido de calidad: la opción de los creadores de contenido
Llegamos al momento culmine, estamos frente al lienzo en blanco y a punto de crear una comunicación. ¿Solo debemos considerar que el video no dure más de 30 segundos? Claramente, no.
Si asumimos que las compañías comprendieron que el diferencial ya no es únicamente la duración de un video, entonces aquí es donde se encuentra el desafío. En cada industria, en cada nicho, en cada segmentación etaria, podemos encontrar creadores de contenido independientes que se ajusten a los requerimientos de la cuenta, que tengan una base followers afines y que sean capaces de generar productos de calidad.
Bonus: 3 tips para la generación de videos en formato Reels.
- Un título descriptivo que genere curiosidad, una respuesta a una necesidad o una novedad/lanzamiento.
- La portada correcta. Aún nos encontramos en el feed de empresas con portadas negras o blancas.
- El audio. La selección debe ser cuidadosa. A grandes rasgos, podríamos optar por el “audio de moda” que solemos escuchar cuando consumimos videos y esto genere una empatía automática; o por el audio “representativo” u oficial de la marca (pero no abusen con la repetición).
¿LOS VIDEOS DE LARGA DURACIÓN TIENEN FECHA DE VENCIMIENTO?
Si observamos el desarrollo mundial de los podcasts y las tendencias de consumo de medios, muchos consideran que a la radio tradicional le queda poco tiempo de vida. Hay un gran debate sobre ello. Y aquí la radio se encontró frente a un desafío que cuestionaba sus cimientos distintivos más duros, debiendo mutar para sobrevivir. Con el tiempo, se fue transformando en un medio de comunicación digital multi pantallas: programas grabados para podcasts, canales de YouTube, canales de TV (radio con imagen), aplicaciones para Mobile; e inclusive sumaron diferentes formas de financiación (suscripción paga).
Esta introducción nos lleva a pensar que quizás nada muere, que el F5 está siempre al alcance de la mano. En 2022 comenzó a afianzarse una convivencia sana de consumo de videos largos con los cortos, especialmente gracias a las transmisiones de Twitch. Estas transmisiones comenzaron a traspasar la plataforma y a multiplicarse en diferentes lugares como YouTube o Spotify. Podemos encontrar en YouTube muchos canales cuyo contenido son entrevistas o charlas que pueden durar horas (literal), Y la tasa de reproducciones crece mes a mes. De hecho, supieron aprovechar esta tendencia y comenzaron a editar esos videos (acortando y dividiéndolo en temas) para generar más reproducciones ofreciendo más contenido.
Esta resucitación de los videos largos podría ser aprovechada en un futuro por las marcas. Un contenido descontracturado, con variedad temática, sin un hilo conductor aparente, pero que gire alrededor directa o indirectamente del producto o servicio que originalmente se deseaba proporcionar, podría ser una llave maestra para un nuevo formato de contenido. Y de publicidad.